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23/9/22 00:00

‘Lo que el viento se llevó’: la importancia de anclar los rastrojos al lote para que no se vuelen los rindes

En Productores Aapresid de Bandera muestran el impacto de la erosión eólica en la productividad de maíces sobre coberturas de vicia voladas por el viento.

En los últimos años  el régimen de precipitaciones en la zona de la Chacra Aapresid Bandera cambió. Con ambientes un poco más húmedos, y el aporte de las napas cercanas a la superficie, muchos productores se sumaron a la Agricultura Siempre Verde. Aunque en año seco como éste la napa se retrae, no limita la cantidad de cultivos que se realizan.

Además de producir soja, maíz, trigo y, en determinados casos,  girasol o algodón, los productores de la Chacra Bandera fueron por más. Puntualizando en las rotaciones, y en la nutrición, comenzaron a incorporar cultivos de servicios. Dentro de los más elegidos se encuentra la vicia, no sólo por la cobertura y control de malezas, sino  también por su aporte de nitrógeno.

En esta zona son habituales las tormentas muy fuertes en el período previo al cultivo estival y debido a la topografía no es tarea fácil lograr que el rastrojo permanezca en el lugar sin que se lo lleve el viento. Previo a la implantación del cultivo de verano, la vicia ya se encuentra seca, y cuando el viento es fuerte, envuelve las plantas y se forman rollos gigantes. 

Lo que el viento se llevó.

En la Chacra Bandera, le pusieron números a la pérdida de cobertura de vicia provocada por los vientos. ¿Cómo? midiendo el efecto en la productividad del maíz posterior. “Hay que entender que en las zonas desprotegidas - por ejemplo aquellas que no cuentan con cortinas forestales o rompevientos - , si el primer viento se lleva el rastrojo el segundo volará el suelo, produciendo una verdadera erosión eólica. Entonces perdemos realmente productividad,  ya que los primeros estratos del suelo son los más productivos” explicó Emilse Vigliecca, Resp. Técnica de la Chacra.

Todo lo anterior sin mencionar que la acumulación despareja de ‘rollos’ de vicia seca - aun los más pequeños - dificulta labores como la siembra, provocando atoramientos en la máquina. 

Apoyado por imágenes de índice NDVI,  se captaron diferencias en la actividad fotosintética de maíces sembrados al amparo de cortinas forestales, donde el viento no pudo con los rastrojos de la vicia previa, respecto de aquellos sobre suelos que, por efecto del viento, quedaron despojados de los residuos de la leguminosa de servicios.

Los efectos se vieron directamente en el mapa de rendimiento, con las mejores productividades detrás de las cortinas rompevientos. En uno de los lotes, el rendimiento del maíz sobre cobertura de vicia fue de 9750 kg/ha, mientras que en las zonas desprotegidas resultó de 8250 kg/ha. La diferencia de rinde fue de 1500 kg/ha (-15,4%). En otro de los lotes, la diferencia de rinde llegó a 900 kg/ha (-9,2%).

foto cuerpo nota

Foto: a la izquierda se muestra la ubicación de las cortinas forestales, y a la derecha los mapas de NDVI donde se ve claramente el mejor crecimiento (tono más verde) de los maíces al resguardo de las mismas.

Retener los nutrientes en el lote

Según explica Vigliecca, en los últimos años, ha habido un aumento muy grande de la superficie de vicia sembrada en la zona, cuando las condiciones climáticas lo permiten. En este contexto de precios altos de fertilizantes, su incorporación no es solamente sustentable, sino también económicamente viable

El aporte de nitrógeno de la vicia es mayor por la parte aérea, que por raíces. Es por eso que resulta importante tratar de que el rastrojo aéreo quede en el lote. Si esto no sucede, no sólo queda descubierto el suelo, sino que también se está perdiendo nitrógeno potencial.

Experiencias en la zona revelan que la producción de N de un CS de vicia en la puede rondar los 200 kg N/ha en la parte aérea y 50 kg N/ha las raíces. Esto demuestra que la parte aérea es la que aporta la mayor cantidad de N, y si se pierde, se pierden los servicios por los cuales se la siembra.

Teniendo en cuenta la importancia de la cobertura es clave definir estrategias para retenerla. En este sentido, además de la probada efectividad de las cortinas forestales, la Chacra baraja opciones como la siembra de vicia con alguna gramínea en baja densidad. “Como la gramínea tiene un mejor anclaje y un mayor tamaño de planta, va frenando esa voladura de rastrojo”.

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